De pequeño me encanta recibir regalos (y a quién no) y no había cosa más divertida que escribir la carta a los Reyes Magos (
Pensé: "el Balta tiene que estar de coña", pero no. Al parecer para aquel puto pobre analfabeto "Game Joy" y "Gameboy" sonaban igual. Despues de aquello me hice fan (como en el Facebook, mira) de Gaspar.
"Gaspar tiene pinta de enrrollado, este va a ser mi año". Qué equivocado estaba...
En aquel momento el amo era Mario (no, no me refiero a Mario Conde). El super Mario III lo estaba petando, así que era el momento de pedirle a Gaspar la 8 bits de Nintendo. Gaspar se cubrió de gloria y acabé con una Neofami.
Nada, tocaba tirar de comodín y buscar cobijo en los brazos del viejo Melchor.
Pasaron unos añitos en los que Melchor no me defraudó (un Hero Quest, una bici de montaña...) y creía que había llegado el momento de dar el salto a las 32 bits. Le pedí una Playstation (no quería que volviesen a liarla parda y le expecifiqué: "la de Sony. No Somy o Sonny, la de SONY!!"). El viejo patán no tardó en joderla equivocarse nuevamente y me dejó un "regalito" (nunca mejor dicho) a los pies de la cama:
¿¿Pero qué mierda...?? ¿¿La playstation azul?? Vamos a ver Melchor: ¿Te he hecho algo en una vida anterior o es que te has puesto de acuerdo con el negro y el pelirrojo para joderme la existencia? Hasta hubiese preferido una Sega Saturn antes que semejante truño!!!
Total, que desde aquel día le escribo la carta directamente a mis padres, que son igual de inútiles que los reyes con los regalos, pero al menos les tengo confianza del día a día.
Hace falta ser un puto racista para comentar tal gilipollez normal que te trajeran eso tus padres no te quieren
ResponderEliminarVaya basura de post tronco hahaha